El
retablo de San Jerónimo (óleo sobre tabla, 2,24 x 0,66 m.) es una de las obras
pictóricas más importantes y de mayor categoría de cuantas conserva el Museo
Nacional de Escultura. El retablo llegó al Museo Provincial procedente del
convento jerónimo de la Mejorada de Olmedo. Las pinturas fueron ya
tempranamente atribuidas al pintor Jorge Inglés, “célebre por el famoso
retablo de Nuestra Señora de los Ángeles que le encargara el marqués de
Santillana para el hospital de Buitrago”.
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Esta fotografía y los detalles del mismo proceden de: http://museoescultura.mcu.es/ |
El
retablo consta de una estructura de finas tracerías góticas, arcos angrelados y
doseletes. Las diferentes escenas narran los principales acontecimientos
hagiográficos de la vida de San Jerónimo. Los dos episodios milagrosos del
cuerpo superior hacen referencia a la milagrosa
domesticación del león después de extraerle la espina de la pata, y de la conversión de león
en una ayuda para la comunidad, mostrando el camino del monasterio a unos
mercaderes perdidos. La historia del león, convertido en un compañero
inseparable de San Jerónimo en su iconografía, es una trasposición referida al
hecho acontecido a San Gerásimo, un desconocido anacoreta palestino, de cuya
hagiografía se apropiarían los relatos relativo a San Jerónimo.
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La milagrosa domesticación de león |
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El león ayudando a unos mercaderes a llegar al Convento de San Jerónimo |
Las
escenas del cuerpo inferior cuentan, en una atmósfera llena de intimismo y
detalle, la Última
comunión del santo y el Entierro de San
Jerónimo. La narración del buen morir de San Jerónimo es fruto del texto apócrifo
de Eusebio de Cremona, un tema tardío que inicia su andadura a finales del
siglo XV y que tendrá cierto éxito a partir del movimiento contrarreformista.
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La última comunión de San Jerónimo |
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El entierro de San Jerónimo |
En
el banco la representación de cuatro santos, flanqueando dos a dos la imagen de
Cristo varón de
dolores con las figuras dolientes de San Juan y la Virgen, encaja
con los presupuestos iconográficos del momento. Además de San Agustín y San Gregorio, las
imágenes de Santo
Domingo y San
Sebastián vienen a completar el conjunto. La consolidación y limpieza del
retablo sirvió para descubrir la punta de la flecha que sostiene San Sebastián
en sus manos, disipando así la creencia de que se trataba de la figura del
posible donante. La interpretación correcta de este personaje, que ya había
sido afirmada por Post, llama la atención por el tratamiento de sus ropajes
vistosos y elegantes, siguiendo un modelo habitual en la época alejado del
tradicional San Sebastián desnudo y asaeteado.
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La Virgen |
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Cristo Varón de Dolores |
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San Juan |
Aunque
en un principio se desconocía el nombre del donante que mandó realizar el
retablo, las armas heráldicas que muestra, pertenecientes a algún eclesiástico
de la familia Fonseca, corresponden a don Alonso de Fonseca (1418-1473),
arzobispo de Sevilla. Dicho personaje emprendería distintas obras de mecenazgo
artístico entre las que hay que destacar esta magnífica obra. Una crónica del
Monasterio de la Mejorada (fechada a partir de 1572) proporciona la noticia de
su donación, al indicar que había sido “Don
alonsso de fonseca Arçobispo de Sevilla”, quien “nos hizo los retablos
de sant bartolomé y sant jerónimo”, aclarando definitivamente el origen de
este retablo.
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Santo Domingo |
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San Gregorio |
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San Sebastián |
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San Agustín |
Ambos
retablos estarían ubicados en la nave de la iglesia monacal. De allí se
retirarían a comienzos del siglo XVIII, entre 1703 y 1706, sustituidos por dos
retablos bajo las mismas advocaciones primitivas con estructura de talla y
pinturas de Lucas Jordán, que se trasladaron después de la desamortización a la
capilla de la Soterraña, en la iglesia de San Miguel, donde todavía se
encuentran. Los retablos donados por Don Alonso desaparecen ahora de su
ubicación original. Así, el retablo de San Jerónimo pasa a ocupar una de las
esquinas del primer claustro, desde donde es trasladado a Valladolid. Asimismo,
es entonces cuando el dedicado a San Bartolomé, quizás debido a la misma mano
de Jorge Ingles, desaparecería o se llevaría a otro lugar en la actualidad
ignorado.
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Retablo de San Jerónimo |
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Retablo de San Bartolomé |
La
presencia de don Alonso ocupando la sede abulense, a cuya demarcación
pertenecía Olmedo, explica la relación de obispo con este insigne cenobio. Al
mismo tiempo, el intercambio de los derechos de señorío sobre las villas de
Coca y Saldaña, que llevara a cabo este personaje con el mismo Íñigo López de
Mendoza, marqués de Santillana, explicaría el encargo de la pintura a un
artista como Jorge Inglés, que ya había trabajado para él.
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Retablo del Hospital de Buitrago o de los Gozos de Santa María |
Estilísticamente,
el retablo de San Jerónimo sigue los esquemas empleados por el maestro en el retablo de Buitrago (primera pintura hispanoflamenca castellana documentada),
hispanizando de algún modo los tipos humanos dentro de plegados amplios y
acartonados, a favor de un realismo trágico y concentrado que siempre ha
llamado la atención a la hora de profundizar en su estudio. El tratamiento
cuidadoso de la anécdota y el detallismo en el paisaje suponen una aportación
fundamental y realmente temprana a la historia de la pintura española. En
definitiva estamos ante una obra realmente maravillosa y fastuosa.
BIBLIOGRAFÍA
- ARIAS
MARTÍNEZ, Manuel: “Sobre el retablo de San Jerónimo del pintor Jorge Inglés”, Boletín del Museo Nacional de Escultura,
núm. 1, 1996-1997, pp. 7-14.
- VV.AA.:
Pintura del Museo
Nacional de Escultura, Museo Nacional de Escultura, Valladolid, 2001.
Muy buena como todas las entradas y con fantásticas fotografías pero sobre todo agradecerte tu constancia en sacar nuevos temas cada semana (es un esfuerzo). A ver si hay suerte y en Madrid o en Valladolid se puede hacer lgún día una pequeña muestra de todo lo conservado de Jorge Inglés del que cada año se va descubriendo alguna obra nueva.
ResponderEliminarSolo como pequeña pega poner en duda la atribución de la autoría a Giordano de las pinturas de los retablos nuevos, el San Jerónimo, no me parece de suficiente calidad pero vaya, pero el San Bartolomé o está muy repintado o seguro que no, de hecho me suena que es una copia del San Bartolomé de Navarrate el mudo de los retablos del Escorial