lunes, 26 de enero de 2015

PINTURAS MURALES EN EL VALLE DEL ESGUEVA: Amusquillo, Villanueva de los Infantes y Villarmentero de Esgueva


En el valle del Esgueva encontramos tres pequeños pueblecitos que conservan restos de pinturas murales muy interesantes. No todos tienen la misma importancia. Si bien en Amusquillo apenas se conservan restos, y lo poco conservado apenas nos es visible debido al estado de deterioro en que se encuentra, todo lo contrario ocurre en Villanueva de los Infantes, y sobre todo en Villarmentero, que cada vez que se pica el enlucido aparecen nuevos restos, y por cierto, bastante bien conservados.

AMUSQUILLO. Iglesia parroquial de San Esteban Protomártir
En el muro sur de la capilla mayor, por encima de unos arcosolios, aparece en el centro una figura sedente ¿Virgen con el Niño?, a nuestra derecha San Miguel alanceando al dragón y a nuestra izquierda un Santo que parece vestido de diácono, quizá San Esteban, portando en su mano izquierda un libro. La pintura se fecha en el siglo XV.

San Miguel venciendo al demonio
¿Virgen con el Niño?
San Esteban

VILLANUEVA DE LOS INFANTES. Iglesia parroquial de Santa María la Mayor
El edificio, tal como se conserva hoy, es el resultado de una larga y compleja historia constructiva. Consta de cabecera cuadrada y una nave, que en tiempos debieron ser tres, la meridional reocupando lo que antes había sido un pórtico. La cabecera de la iglesia se ve flanqueada por la sacristía por el norte y la torre por el sur, adosándose a ella.
Se pueden distinguir tres fases constructivas: la más antigua que se remonta a época prerrománica, otra que se puede echar claramente en tiempos románicos y una tercera, la postmedieval, que se manifiesta en una serie de añadidos y reformas de las anteriores.

¿Reunión?
Ángel de la Anunciación
Virgen de la Anunciacion
De la época prerrománica se conserva, de forma más o menos completa, la nave, actualmente revocada y horadada en ambos muros en tiempos posteriores a la Edad Media para abrir sendos pares de arcos con que acceder a las nuevas naves laterales. En la parte superior del muro sur se ven tres ventanitas, cada una tallada en un bloque de piedra caliza, mostrando arco de herradura trasdosado de molduras. Otra ventana de similares características se conserva todavía en el lado norte, lado en el que hay una puerta de medio punto que incluso pudiera ser del mismo momento –pero tal vez también románica– y que daría acceso a una dependencia alta situada a los pies de la nave, una especie de coro.
Las reformas de época románica afectaron a la cabecera y al pórtico que se añade a mediodía. La capilla mayor es cuadrada, con cubierta a dos aguas y revocada por completo, tanto al interior como al exterior. En el testero conserva una saetera abocinada, bastante maltratada pero que parece tener exteriormente arco de herradura. El alero, muy reconstruido durante la última restauración, tiene cornisa ajedrezada sostenida por canecillos, conservándose los ocho originales en el lado septentrional: algunos rotos, otros en proa de nave y también con motivos geométricos.

¿Qué representa?
Salvaje
En el interior del ábside central se encuentran algunos restos de pinturas murales. Así, en el testero del presbiterio se conserva una Anunciación, sobre la cual se puede ver una especie de reunión. A su vez, debajo de la Anunciacion se observa un tema bastante extraño que nadie sabe interpretar. En el lado del Evangelio se conserva en bastante buen estado una curiosa representación de la Última Cena. Hasta hace unos pocos años también se conservaban en la ventana de la Epístola dos representaciones de Salvajes, uno de las cuales ha desaparecido en gran parte debido a la humedad y falta de conservación.

En la obra Rutas del mudéjar en la provincia de Valladolid se considera que fueron realizadas entre finales del siglo XII y comienzos del siglo XIII, teoría que contrasta con la que posteriormente se recogió en la Enciclopedia del románico de Castilla y León que las fecha hacia el año 1500. Podéis profundizar en el estudio de estas pinturas y de esta iglesia en el siguiente post http://ermitiella.blogspot.com.es/2013/12/santa-maria-de-villanueva-de-los.html, os lo recomiendo, así como el propio blog.
 
Sagrada Cena

VILLARMENTERO DE ESGUEVA. Iglesia parroquial de Santa Juliana
Estamos ante “la capilla Sixtina” de la pintura mural medieval en la provincia de Valladolid. Existen gran cantidad de restos pictóricos pertenecientes a diversos periodos y corrientes.
En la bóveda de cuarto de esfera de la sacristía, cabecera de la nave secundaria de la iglesia, se han encontrado restos de pinturas murales fechables en el siglo XIII. Este espacio consta de un ábside semicircular precedido por un tramo recto (presentando, en sus muros, una sucesión de arcos en los cuales acaso existieron pinturas murales).
En el centro del cuarto de esfera absidal preside estas pinturas murales una representación sedente de gran tamaño de la Virgen con el Niño, referencia para una serie de figuras menores que se disponen a ambos lados formando un pequeño ciclo dedicado a la infancia de Cristo. Destaca en su representación el trono, que, representado con brazos a manera de leones, remite al modelo bíblico del trono de Salomón, imagen de la Virgen con el Niño susceptible de una rica iconografía de carácter simbólico en los siglos XIII y XIV. A la derecha de la Virgen con el Niño (izquierda del espectador), las partes inferiores de una serie de figuras resultan de difícil interpretación, si bien la inmediata representación de un monarca con un gesto de reconocimiento hacia esta representación principal permite reconocer en esta zona la representación de la Adoración de los Magos. A la izquierda de la Virgen con el Niño (derecha del espectador), la representación sedente de San José cierra esta escena. A continuación, por esta parte, unas figuras de condición rústica acompañadas por una cabra y por unas ovejas restan, probablemente, de la representación del Anuncio a los pastores. Cierra el ciclo, por esta parte, de más extensión conservada, la representación de la Matanza de los Inocentes, donde destaca la representación sedente de gran tamaño de Herodes, que, con sus piernas cruzadas, a manera de gesto de autoridad, dispone esta masacre, ejecutada por sus soldados con su crueldad acostumbrada en presencia de unas maderas impotentes. Las características del armamento sugieren, con reservas, una cronología del siglo XIII.

Vista general
Grupo central de La Virgen con el Niño
Adoración de los Pastores
Adoración de los Magos
Herodes
Ya en la nave de la iglesia tenemos dos pinturas dedicadas a San Cristóbal. En el muro meridional del tramo tercero de la nave principal del edificio se dispone el santo con el Niño sobre su hombro derecho, mientras que con su mano izquierda se apoya en una vara. En el flanco S.E. del soporte frontero entre los tramos segundo y tercero, el Niño se coloca en su hombro izquierdo, mientras que la vara se representa en la mano derecha con la misión de salvar el río, que es representado por medio de un pez.

San Cristóbal del muro meridional
San Cristóbal del flanco S.E.
En el muro del lado del Evangelio de la capilla mayor, se conservan restos de una Flagelación, en la que Cristo aparece agarrado a una columna delante de una venera.

A los pies de la iglesia, en un pilar debajo del coro alto, se han encontrado los restos de una santa, que quizá corresponda con Santa Catalina de Alejandría, dado que los atributos que porta son una espada y los restos de una rueda.

A los lados del arco que se abre en la capilla mayor observamos múltiples figuras que nos plantean muchas incógnitas. Así, por ejemplo, una figura tocando un cuerno, en el arranque meridional del arco, por su indumentaria ha sido fechada en el siglo XIV. A su lado vemos un animal que parece un gallo. Sobre el hombre con el cuerno parece representarse a Adán y Eva afrontados a los lados de un árbol, seguramente el del pecado. En la misma zona, pero en el extremo contrario del arco, también aparece otro hombre tocando un cuerno. El resto del arco, incluido el intradós del mismo, está completamente decorado con pinturas murales decorativas de carácter geométrico.

Cerca de este último hombrecillo, pero ya en el arranque de la nave, en el lado izquierdo se ve a un hombre a caballo que parece portar lanza y un escudo dividido en cuatro cuarteles. ¿Pudiera ser San Jorge? Por las zonas próximas al arco vemos otras representaciones, si bien no sabemos exactamente que son.

La iglesia cuenta con la particularidad de que los capiteles de esta capilla mayor conservan restos de policromía, hecho que resulta bastante extraño, si bien no hemos de olvidar que la arquitectura románica no estaba tan desnuda de colores como en la actualidad vemos en la mayoría de iglesias.


BIBLIOGRAFÍA
  • DUQUE HERRERO, Carlos; REGUERAS GRANDE, Fernando y SÁNCHEZ DEL BARRIO, Antonio: Rutas del Mudéjar en la Provincia de Valladolid, Castilla Ediciones, Valladolid, 2005.
  • GUTIÉRREZ BAÑOS, Fernando: Aportación al estudio de la pintura de estilo gótico lineal en Castilla y León: precisiones cronológicas y corpus de pintura mural y sobre tabla, Fundación Universitaria Española, Madrid, 2005.
  • URREA FERNÁNDEZ, Jesús: Catálogo Monumental de la provincia de Valladolid. Tomo XX. Antiguo partido judicial de Valoria la Buena, Diputación de Valladolid, Valladolid, 2004.
  • VV.AA: Enciclopedia del Románico en Castilla y León. Valladolid, Fundación Santa María la Real. Centro de Estudios del Románico, Aguilar de Campoo, 2002.



1 comentario:

  1. Visto tu artículo, creo que pudiera ser de tu interés este trabajo que responde a una entrada en mi blog a cerca del análisis que ya hace unos años hice del tema y las conclusiones
    http://ermitiella.blogspot.com.es/2013/12/santa-maria-de-villanueva-de-los.html
    Un saludo

    ResponderEliminar